Hace 24 años que conocí a MAMEN y AMELIA, cuando dejé a mi hijo mayor con ellas, después dejaría a otros dos, no me equivoqué, no sólo porque encontré a las mejores educadoras para mis hijos, sino porque encontré a dos grandes amigas y sobre todo, buenísimas personas.
Los 3 primeros años de la educación de nuestros hijos, son la base de su posterior desarrollo y, gracias a los valores qué les inculcaron durante esos años, tengo hoy unos hijos maravillosos.
Siempre hay algún profesor, a lo largo de nuestra vida, qué deja huella, en casa la dejaron MAMEN y AMELIA.
Muchísimas gracias por ser como sóis y por querernos tanto.